"Viruela del Mono: Lo Que Nadie Te Ha Contado Sobre Esta Infección y Cómo Protegerte"

Viruela del Mono: Qué Es, Cómo Afecta y Cómo Prevenirla

La viruela del mono, también conocida como viruela símica, es una enfermedad viral zoonótica causada por el virus Monkeypox, perteneciente a la familia de los ortopoxvirus. Aunque inicialmente fue identificada en simios y roedores en África, esta enfermedad puede transmitirse a los humanos y, en algunos casos, de persona a persona. En los últimos años, su aparición en distintas regiones ha generado preocupación a nivel mundial.

¿Cómo afecta la viruela del mono al cuerpo?
Los síntomas de la viruela del mono suelen aparecer entre 5 y 21 días después de la exposición al virus. Inicialmente, se presentan síntomas similares a los de la gripe, como fiebre, dolor de cabeza intenso, fatiga, dolores musculares y ganglios linfáticos inflamados, lo que la distingue de otras enfermedades virales.

Posteriormente, aparece una erupción cutánea característica que pasa por varias etapas: manchas, pápulas, vesículas, pústulas y costras. Estas lesiones suelen comenzar en la cara y luego extenderse al resto del cuerpo, incluyendo palmas de las manos y plantas de los pies. En la mayoría de los casos, la enfermedad es autolimitada, con una duración de 2 a 4 semanas. Sin embargo, en personas inmunodeprimidas, niños pequeños o embarazadas, puede ocasionar complicaciones graves, como infecciones secundarias, neumonía o daño ocular.

¿Cómo se transmite la viruela del mono?
El virus se propaga a través del contacto directo con fluidos corporales, lesiones en la piel o mucosas, o mediante objetos contaminados, como ropa o utensilios. También puede transmitirse por gotas respiratorias durante contactos prolongados cara a cara. Aunque no es tan contagiosa como la varicela o el sarampión, el aumento de los casos en humanos ha resaltado la importancia de la prevención.

¿Cómo prevenir la viruela del mono?
Evitar el contacto cercano con personas infectadas: Si alguien presenta síntomas, como erupciones sospechosas, es fundamental mantener la distancia y usar mascarillas.
Higiene adecuada: Lávate las manos con frecuencia y utiliza desinfectantes a base de alcohol.
Evitar el contacto con animales infectados: Especialmente roedores y primates en áreas endémicas.
Vacunación: Las vacunas contra la viruela convencional ofrecen cierta protección cruzada frente a la viruela del mono. En algunos países, se han desarrollado vacunas específicas para este virus.
Aislamiento de casos confirmados: Las personas infectadas deben permanecer en cuarentena hasta que las lesiones hayan cicatrizado completamente.
En resumen, la viruela del mono es una enfermedad que, aunque generalmente leve, puede tener consecuencias graves en ciertos grupos. La educación, la prevención y la atención médica temprana son claves para contener su propagación y proteger la salud pública.

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